
¿Por qué deberías hacer un rediseño de página web?
Tomar la decisión de rediseñar tu página web es un proceso que lleva planificación, tiempo y dinero. La primera pregunta que debés hacerte es: ¿por qué querés hacer un rediseño de tu página web? Más allá de “querer cambiar”, tus motivos tienen que ir de la mano con una estrategia para mejorar tu presencia online.
Hacia un rediseño de página web
La página web de tu empresa, además de estar cuidada y actualizada, tiene que ser acorde con tu imagen corporativa y el centro de tu negocio online. Tiene que tener un diseño web responsive (adaptado a celulares), y debe apuntar a las conversiones para que dé resultados.
Tiene que ayudar a los usuarios a satisfacer sus necesidades y estimularlos a la acción. Por otro lado, debe acomodarse a las tendencias y estéticas dominantes, sin perder de vista una navegación cómoda e intuitiva y una experiencia empática del usuario con tu marca.
Para decirlo simple: cuidá el diseño, los contenidos y la funcionalidad. De este modo vas a facilitar las consultas, la interacción y la compra online, y a obtener, por parte de Google, una reputación positiva.
Importante: no hagas de tu sitio web algo estático que no se actualiza y termina por resultar obsoleto. ¡Ocupate de actualizar los contenidos! Que los textos estén bien escritos, pensados tanto para SEO (posicionamiento en buscadores) como para los usuarios. De una buena estrategia de Content Marketing deriva la tasa más alta de conversiones.
Cómo saber cuándo es hora de un rediseño web
Este listado te va a ayudar a entender si realmente necesitás un rediseño de tu página web. Si algo de esto te está faltando, poné manos a la obra:
Tu página está desactualizada
Si esto ocurre es posible que tu web sea vulnerable a los ataques cibernéticos. Además si no migró a HTTPS, puede ser penalizada por Google por no poseer el certificado de seguridad.
Utiliza lenguajes de programación anticuados
Utilizar lenguajes de programación anticuados como Flash, provoca lentitud de carga, funcionalidad deficiente, efectos visuales fuera de moda, códigos erróneos o textos incorporados como imagen, con lo cual no solo se dificulta la experiencia de usuario sino además, el posicionamiento web.
No utiliza gestores de contenido
Si tu página web no trabaja con CMS (el gestor de contenidos de WordPress) ni utiliza PHP como lenguaje de programación que permite añadir contenido ilimitado, son síntomas de que tenés que renovar.
No tiene optimización SEO
Si pretendés que tu sitio se encuentre entre los primeros resultados de búsqueda y reciba muchas visitas, es necesario que cuente con optimizaciones seo. Si tu web no tiene metatags, descripción, palabras clave, alt text, entre otras cosas, es hora de realizar un rediseño de página web.
El porcentaje de conversión es muy bajo:
Si los usuarios que llegan a tu página y no tienen la posibilidad de comprar, ni pueden descargarse un archivo, ver un video, rellenar un formulario, dejar un comentario o compartir contenido, es una advertencia de que tu web quedó obsoleta y de que estás perdiendo mucho dinero.
No está diseñada para navegar desde un dispositivo móvil
Si entrás a tu web desde tu celular o Tablet y no podés visualizarla correctamente, significa que tu web no es responsive. Esto es un grave error ya que más del 90% de las personas navegan por Internet a través del celular. Con responsive design, la apariencia de tu sitio web se adapta a cualquier pantalla y conserva las URL y la configuración HTML.
La velocidad de carga es lenta
Si esto ocurre, se limita la funcionalidad. Este hecho, literalmente espanta a los usuarios, acostumbrados al “¡ya!” y a la inmediatez de carga del clic. Los robots de Google, por otro lado, también discriminan a las webs que tardan en cargar y las descartan del posicionamiento. ¡Ojo! No siempre este problema está asociado a tu diseño web; puede derivar de un problema con el hosting o del alojamiento del servidor.
La identidad visual no corresponde con la identidad de marca
Tal vez tu página usa los lenguajes de programación adecuados y carga rápido, pero la que presenta tu sitio no coinciden con la identidad de tu marca
El objetivo de tu empresa cambió
Suele ocurrir que el rumbo vira y todo el contenido armado queda desfasado con los nuevos lineamientos.
No es user friendly
El usuario tiene que poder navegar por tu web como pez en el agua. Las secciones tienen que estar a mano y el recorrido debe ser intuitivo. Si esto no pasa, es necesario que realices un rediseño.
El proceso de rediseño de una página web puede demorar días, semanas o meses. Sea cual fuere el grado de dificultad, ocupate de que haya una planificación ordenada y un objetivo en línea con la imagen de tu empresa y el posicionamiento en los buscadores de Internet.