
Beneficios del posicionamiento SEM
Buscar es una de las actividades más importantes de los usuarios de Internet. Cuando hablamos de estrategias de posicionamiento, el objetivo es aparecer primero en los resultados de esas búsquedas. ¿Cómo lograrlo?. En esa nota analizaremos el posicionamiento SEM, cómo funciona y cuáles son sus beneficios.
SEO y SEM, parecidos pero diferentes
Para comenzar, repasemos algunos conocimientos sobre SEO y SEM. Como dijimos en notas anteriores, ambas son estrategias de posicionamiento: SEO es la sigla en inglés de “Search Engine Optimization”, mientras que SEM significa “Search Engine Marketing”.
Las dos son estrategias basadas en búsquedas. Su objetivo es que nuestro sitio sea visible y aparezca en las mejores posiciones en los motores de búsqueda. La diferencia básicamente está en que SEO busca un posicionamiento “orgánico”, es decir, basado en palabras clave. SEM por su parte se refiere a campañas publicitarias o anuncios pagados a los motores de búsqueda. Es fácil reconocer un resultado de búsqueda basado en SEM, ya que éste aparece en la parte superior del buscador con la etiqueta “anuncio” debajo de la URL.
Entonces no se trata de que una sea mejor que la otra, sino que son diferentes. Para decidir, hay que conocer sus ventajas y desventajas, junto con sus prioridades en un determinado momento. ¿Posicionamiento a largo plazo o resultados inmediatos?. En realidad lo mejor es una combinación de ambas estrategias, pues se potencian mutuamente. Las dos son necesarias para conseguir un buen posicionamiento en los motores de búsqueda.
Ventajas del posicionamiento SEM
Según una encuesta realizada recientemente en Paraguay, casi el 60% de los usuarios utiliza Internet para buscar información y el 42% considera que esa información es confiable. Veamos entonces las ventajas del posicionamiento SEM:
- Es una de las formas más efectivas de hacer crecer el negocio en un entorno cada vez más competitivo.
- Ayuda a mejorar el conocimiento de la marca.
- Genera tráfico directo mediante clics.
- El posicionamiento SEM mejora los perfiles de marca, incluso si los usuarios no cliquean en el enlace.
- Nivela las marcas desconocidas con las grandes marcas, porque éstas no necesariamente se ubican en los primeros puestos de búsquedas.
- Aumenta la cantidad de interacciones con los usuarios.
- Coloca el anuncio frente al usuario motivado en el momento justo en que está listo para hacer la compra.
- Da a conocer el sitio a una mayor cantidad de clientes.
- Da a conocer el producto de manera rápida y efectiva.
- Posiciona mejor al sitio web frente a la competencia.
- No tiene la limitación del uso de palabras clave.
- El método de pago es “CPC” o sea, “costo por clic”. Es decir que la tarifa que se paga se corresponde con la cantidad de veces que los usuarios cliqueen en el anuncio que se publica.
- Rentabilidad y resultados a corto plazo.
- Permite segmentar al público objetivo con varios parámetros como horas, localización, idioma, dispositivos.
- El sitio promocionado aparece en las primeras posiciones de los motores de búsqueda.
Mis recomendaciones
Como dijimos, lo mejor es una estrategia que combine ambas herramientas, SEO y SEM. Esto es porque si bien la estrategia SEM nos proporciona resultados inmediatos, éstos cesarán tan pronto finalice la campaña. Sin embargo, si hicimos bien las cosas, los resultados pueden extenderse en el tiempo a partir de la estrategia SEO.
Por otra parte, los contenidos y estructura del sitio web no tienen tanto peso como en una estrategia SEO. Sin embargo, los motores de búsqueda como Google ponderan factores como porcentaje de clics previsto, relevancia del anuncio y experiencia de la página de destino para posicionar el anuncio en un lugar concreto.
Antes de comenzar una campaña PPC:
- Elegí el formato más conveniente para tu campaña (palabras claves, anuncios de lista de productos, anuncios de compras).
- Estructurá y categorizá tu sitio web para facilitar la labor de los motores de búsqueda.
Durante la campaña:
- Realizá un seguimiento en tiempo real a fin de introducir los cambios que sean necesarios para una mayor optimización.
- Controlá tu inversión: solo se paga por las interacciones entre usuario y texto. También podés en cualquier momento calcular el ROI (Return On Investment) o retorno de la inversión, es decir la diferencia entre lo invertido y lo generado, para realizar ajustes si fuera necesario.
¿Te resultaron útiles estos consejos sobre posicionamiento SEM? ¡Envianos tus comentarios!